Este plato, a pesar de ser tan sencillo y delicioso, es de lo más versátil. Básica u originalmente, sólo lleva cebolla, tomate, pimiento verde y rojo y calabacín. Sin embargo, se le puede añadir ajo y berenjena, como es en el caso de hoy, en el que lo he elaborado. Lo que más me gusta del pisto es la cantidad de productos y/o platos a los que puede acompañar e, incluso, reunir con el fin de crear una deliciosa y distinta receta. Algunos ejemplos son unos huevos fritos, chorizo, morcilla, y un sinfín de delicias para el paladar, a las que su sabor resaltará. Más adelante publicaré gustosas fórmulas gastronómicas que lo llevaran incorporado. ¡Ya verán!
Ingredientes:
1 Calabacin grande
1 Cebolla grande
1 Berenjena grande
1 Tomate grande
1 Diente de Ajo
1/2 Pimiento Verde
1/2 Pimiento Rojo
Sal, Aceite de Oliva (3 cucharadas soperas)
Metodo:
Cortar todas las verduras en cuadros aproximadamente de 1,5 cm de grosor.
Laminar el Ajo finamente.
Calentar la sarten con el Aceite de Oliva y añadir el Ajo hasta que este levemente dorado. Añadir la Cebolla y los Pimientos, sofreir, y cuando este translucida echar el Calabacin, y la Berenjena. Dejar sofreir unos minutos y agregar el Tomate. Cocinar todo a fuego lento para dejar que el liquido excedente se evapore.